«Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.»

Hebreos 4:15-16

Cuando está siendo tentado, recuerde que no es un pecado el ser tentado. La tentación no es pecado. Si la tentación fuese pecado entonces el Señor Jesús sería pecador, y no lo es. Hebreos 4:15 enseña: “Porque no tenemos un SUMO SACERDOTE que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue TENTADO en todo según nuestra semejanza, pero SIN PECADO.”

Cristo fue tentado en todas las áreas tal y como nosotros lo somos, mas Él no pecó. Jesucristo sintió lo que usted siente. Él fue completamente hombre como si no hubiese sido Dios. A su vez, fue totalmente Dios como si no hubiese sido hombre. Él fue el Dios Hombre. ¡Gloria a Dios! Cristo nunca pecó, aunque sí fue tentado.

PUNTO DE ACCIÓN:

¿Está enfrentando actualmente una tentación y piensa que nadie jamás la ha enfrentado? ACUDA al Señor y Él le AYUDARÁ a VENCERLA.

Este devocional procede de los mensajes del Dr. Adrián Rogers del Ministerios El Amor que Vale.